Los orígenes de la hermandad se remontan al año 1932. Se sabe que hubo una salida que ocurrió en los días de la Semana Santa de ese año. La guerra civil hizo que esta agrupación de jóvenes se viera muy castigada, quedando circunscrita la veneración a la imagen al entorno de la familia Alvarez-Ossorio. Es en los Remedios donde resurge la devoción, llegando a tener la Virgen un altar en la capilla de la cripta de la parroquia del barrio. En este periodo de más de cuarenta años el grupo se asienta en dicho zona, siguiendo la tradición de la Fiesta de la Cruz. En el seno de la asociación se funda la Banda de Cornetas y Tambores de Nuestra Señora del Sol, en el año 1975. Se constituye este grupo de fieles en agrupación parroquial el 9 de Junio de 1987. Dos años más tarde se produce un cambio de sede, al barrio de El Plantinar.

En diciembre de 1995 queda erigida como hermandad de gloria realizando durante 10 años la salida procesional desde la Iglesia de la Residencia de Hermanas Salesianas de Nervión. El 16 de junio de 2006 es erigida hermandad de penitencia con sede en la Parroquia de San Diego de Alcalá. El 16 de octubre de 2006 la imágenes son trasladadas desde el oratorio privado a su nuevo altar en la Parroquia. El Sábado de Pasión de 2007 realiza su primera estación de penitencia. En 2009 estrena la Sagrada Conversación bajo palio. En 2010 hizo por primera vez la estación de penitencia a la Catedral en la jornada del Sábado Santo

La calavera que pisa el Señor, símbolo del pecado

La imagen del Cristo la realizó José Manuel Bonilla en 2003 a tamaño natural. Mide 1,83 centímetros y está tallada en madera de cedro. Bonilla, director artístico de la hermandad, también realizó las imágenes de la Virgen (1990), San Juan (2008) y María Magdalena (2009)

Es de estilo neobarroco dorado e iluminado por cuatro candelabros de guardabrisas. Pertenecía a la Hermandad de la Vera-Cruz de Lebrija, cuya compra la sufragó un grupo de hermanos en 2006. El canasto fue tallado por Francisco Rodríguez en 1951 y los respiraderos son del taller de Nuestra Señora del Carmen (1985-89). El llamador es de Jesús Domínguez y las cartelas, en plata, de Borrero. El paso de palio está diseñado totalmente por Bonilla, quien recupera motivos estéticos del pasado. Así tanto el techo de palio como las bambalinas exteriores e interiores están pintadas, labores realizadas por Vicente Papalardo y Fernando de la Maza, quienes también han pintado el manto de la Virgen y los ropajes de San Juan y la Magdalena.

La Dolorosa luce saya confeccionada en base a un paño bordado de hojilla y lentejuelas, del siglo XIX, que adquirió un grupo de hermanos en Túnez. Su ajuar se completa con un escapulario. La corona es de Jesús Domínguez (2005), el mismo autor de la ráfaga que llega hasta los hombros, estreno de este año. La media luna que lleva a los pies es de Orfebrería Maestrante. Los varales y crestería del palio están realizados en madera de cedro por Manuel Montañés con incrustaciones de plata de Domínguez. Los respiraderos aún salen lisos, en madera. Los candelabros delanteros y traseros así como el juego de jarras proceden de la Hermandad de la Soledad de Bollullos, que los adaptó Domínguez. Fue un regalo de la banda de cornetas y tambores de la hermandad. La aureola de San Juan es del siglo XVII, en plata, y la de la Magdalena, de Domínguez (2009). La figura de entrecalle es una reproducción en miniatura de la Virgen del Pilar, donación de un grupo de hermanas oriundas de Zaragoza

Destaca la Cruz Alzada que abre el cortejo, en madera y con orfebrería de Jesús Domínguez, diseñada por Bonilla. En su cruceta lleva insertada una reliquia del Lignum Crucis. La insignia que más llama la atención es el Simpecado, obra originalísima que recupera el estilo primitivo de éstas insignias en el siglo XVII. Se trata de una gran pintura al óleo enmarcada por estucados y estofados en oro. La pintura central se inspira en una obra del pintor sevillano del siglo XVII Antonio del Castillo, trasunto de la que se venera en la iglesia de Santa María Mater Dei de Venecia y a la que también se le rendía culto en el convento de Santa María de los Reyes de Sevilla. La pintura es obra de José Manuel Bonilla Cornejo y Fernando de la Maza Fernández y la orfebrería, realizada en plata de ley, es de Jesús Domínguez, quien también labró otras insignias como el Libro de Reglas y el asta de la Bandera del Triunfo de la Santa Cruz y el Guión Sacramental

La hermandad ha variado el itinierario. Desde el año pasado sale de su capilla propia que está anexa a su sede canónica

Ciriales para la Santa Cruz y varas para el cortejo del Cristo, realizadas por Orfebrería Angulo (Lucena). Cuatro faroles para el paso de palio adquiridos a la Hermandad de la Obediencia de Guadix. Guión Franciscano con diseño de José Manuel Bonilla y bordado por Ana Bonilla. Relicario de San Diego de Alcalá donado por las monjas clarisas de Alcalá de Henares