Existió una originaria hermandad de la Bofetá de 1585, constituida en Monte-Sión, hasta el siglo XIX, cuando desapareció, constando la última sede en el Beaterio de la Trinidad. La refundación se produciría en la Parroquia de San Román en 1919 y, un año después salió por vez primera. En 1924 se traslada la hermandad a San Antonio de Padua. En 1968 pasa a la actual sede canónica en la Parroquia de San Lorenzo. Se da la circunstancia de que las imágenes titulares reciben culto en la capilla parroquial en la que en su día fue venerada la imagen del Gran Poder

La orientación del Señor en el misterio, único en Sevilla que mira hacia la trasera

La salida desde la parroquia de San Lorenzo. Al regreso, por Alemanes y Hernando Colón o en el entorno de la Plaza de San Lorenzo, antes de la entrada

El misterio es obra completa de Antonio Castillo Lastrucci, de 1923. También la Virgen del Dulce Nombre y el San Juan (restaurado por Jesús Méndez Lastrucci en 2004), las esculpió en 1924

El misterio, de estilo neobarroco, tiene diseño de Juan Pérez Calvo, con talla de Fernández del Toro y relieves y cartelas de Ortega Bru. Los ángeles pasionarios de las esquinas son de Francisco Antonio Gijón, del XVII. Las potencias en plata del Señor son de Jesús Domínguez. El paso fue ampliado en 1977 por Antonio Vega y dorado por Antonio Díaz.

El Señor lleva túnica blanca con bordados de Caro. La parihuela del paso de palio es de Juan García Casas, de Córdoba (1999). De Gabella son los respiraderos y jarritas de plata, y las jarras. Ofebrería Macarena labró los candelabros de cola en plata de ley. Los varales plateados son de Andrés Contreras, la peana de Seco Imberg y la candelería y el templete, en plata y marfil son de Jesús Domínguez. La corona de plata dorada que luce la Virgen es de Joyería Dalmás, obra de 1927. El alfiler de oro con el escudo mercedario es una donación de las Madres Mercedarias de la Asunción. Los bordados del palio y del manto, ambos en terciopelo azul, son de Juan Manuel, de 1923. La Virgen luce una saya blanca de tisú bordada en oro por Victoria Caro en 1936. El mantolín y la túnica de San Juan son del taller de Esperanza Elena Caro

Los apliques de la Cruz de Guía son de Domínguez. Del taller de Caro, el Simpecado, el Senatus y los paños de bocinas. El Estandarte tiene el asta de plata de Orfebrería Macarena y los bordados de Caro. El Banderín del Mayor Dolor es del taller de Vera-Cruz, de Salteras

Desde el 16 de diciembre de 2009 esta hermandad está dirigida por un comisionado impuesto por el Arzobispado. El imaginero Antonio Castillo Lastrucci realizó un misterio muy logrado en su composición, siendo el primero que realizaba. De incontestable mérito artístico son las imágenes de la Virgen y San Juan. La Virgen es el mejor ejemplo de Dolorosa castiza. El paso de palio es uno de los más conseguidos de la Semana Santa y constituye una joya del bordado sevillano por su armonía y calidad, pues lleva la firma de Juan Manuel Rodríguez Ojeda. El sonido de las caídas al tocar los varales es muy característico. La imagen del Cristo del Mayor Dolor, titular de la hermandad de gran valor artístico, no sale en la cofradía. La Hermandad ha comenzado un proceso de restauración y conservación de sus enseres e imágenes

Restauración de la orfebrería del estandarte. Restauración y plateado de los varales y jarras del paso de palio. Restauración de los candelabros de cola. Todo realizado por Orfebrería Andaluza. Parihuela y estructura interior del paso de misterio, de Juan García Casas. Restauración de Malco, por Jesús Méndez Lastrucci. Restauración de la Inmaculada del Simpecado por Carmen Bahima. Restauración de dos ángeles pasionarios, por Carmen Bahima. Nuevos atributos para los ángeles de Jesús Domínguez